Sanción de 880 millones de euros a Scania por participar en el Cartel de camiones

La Comisión Europea ha concluido que Scania infringió las reglas antitrust de la UE.

Acordó durante 14 años con otros cinco fabricantes de camiones el precio de los camiones y el retraso en la puesta en el mercado vehículos dotados de la última tecnología para cumplir con las normas de emisión de gases.

 

En julio de 2016, la Comisión llegó un acuerdo con los seis fabricantes de camiones MAN, DAF, Daimler, Iveco y Volvo / Renault, quienes aceptaron una sanción millonaria a excepción de Scania que decidió recurrir esta sanción por el caso Cártel de fabricantes de camioens. 

En consecuencia, la Comisión inició la investigación contra Scania que concluyó ayer con la decisión del Tribunal Europeo de la Competencia. La Comisaria del Tribunal, Margrethe Vestager, declaró que  “La decisión de hoy marca el final de nuestra investigación sobre un cártel que funcionó durante muchos años. Este cártel afectó a un número muy importante de transportistas por carretera en Europa, ya que implicó a 9 de cada 10 camiones pesados y medianos vendidos en Europa entre 1997 y 2011. Los fabricantes eligieron infringir la ley para perjudicar a sus clientes en lugar de competir entre ellos para conseguir entre otras cosas, mejoras medioambientales, tecnológicas y en precios.  Estos camiones representan alrededor de tres cuartas partes del transporte interior de mercancías en la Unión Europa y desempeñan un papel vital en la economía europea.”

El transporte de mercancías por carretera es una parte esencial del sector europeo del transporte y en parte depende de los precios de los camiones. La decisión de la Comisión se refiere específicamente al mercado para la fabricación de camiones con un peso entre 6 y 16 toneladas y camiones pesados de más de 16 toneladas.
La investigación de la Comisión ha concluido que Scania, como fabricante de camiones pesados, contribuyó, en el denominado Cártel de Camiones, a establecer conjuntamente con el resto de fabricantes, los precios de fábrica que determinan los precios que finalmente se fijarán en los concesionarios. 

Además se le acusa de retrasar la introducción de tecnologías que reducen las emisiones de gases para camiones de tamaño medio y pesado, desde el Euro III hasta el actualmente aplicable Euro VI y de trasladar dichos costes a los clientes. 

La Comisión  demostró que se produjeron entre 1997 y 2004 reuniones de altos directivos de estas compañías, a veces al margen de ferias u otros eventos.  A partir de 2004, el cártel se organizó a través filiales alemanas de fabricantes y los participantes generalmente intercambian información electrónicamente  y por conversaciones telefónicas.

A lo largo de los 14 años, las discusiones entre las empresas abarcaron los mismos temas, los aumentos de los precios correspondientes a la “lista bruta” es decir, a los precios de fábrica, el calendario para la introducción de nuevas tecnologías de emisiones y cuando trasladar los costes a sus clientes.

La decisión de la Comisión subraya la importancia de un mercado competitivo que funcione para desarrollar y difundir tecnologías menos contaminantes y más rentables, elementos clave de la próxima Estrategia Europea sobre una movilidad de bajas emisiones.

Multas
Las multas se fijan sobre la base de las Directrices de 2006 de la Comisión sobre multas. Para fijar la cuantía de las multas, la Comisión tuvo en cuenta las ventas de camiones pesados de Scania, así como la gravedad de la infracción, la elevada cuota de mercado combinada de las empresas participantes, el alcance geográfico y la duración del cártel. 

Además, Scania decidió no cooperar con la Comisión durante la investigación. En consecuencia no obtuvo una reducción de la multa y la sanción se ha elevado finalmente a 880.523.000 Euros.