El Gobierno prepara una ley para luchar contra los falsos autónomos

El Ministerio de Trabajo y Economía Social ha confirmado que la lucha contra los falsos autónomos está entre sus prioridades. La medida intenta atajar el tremendo fraude que resulta de esta figura, ya que son trabajadores por cuenta propia que, en realidad, trabajan siempre para el mismo pagador, pero que deben responsabilizarse de pagar sus impuestos como autónomos (IRPF y cotizaciones a la Seguridad Social).

La ministra de Trabajo y Economía Social, Yolanda Díaz, ha informado de que la intención de su departamento es modificar el marco normativo con cierta premura, que deslindó de la complicada negociación del nuevo Estatuto de los Trabajadores. Se trataría de eliminar las deficiencias del TRADE (Trabajadores Autónomos Económicamente Dependientes), en la que sólo están registrados 9.000 trabajadores por cuenta propia.

Al mismo tiempo que se establece un nuevo marco jurídico, la lucha contra el fraude también pasa por reforzar el control de los inspectores de trabajo. Según los datos que maneja este ministerio, en 2018 se ordenó la regulación como asalariados de casi 19.000 trabajadores, obligados a trabajar como autónomos, diez veces más que en los años anteriores.

Sin embargo, con la nueva configuración del Gobierno, en la que las competencias de Trabajo y Seguridad Social se han desmembrado y repartido en dos ministerios, habrá que coordinar este tema en numerosas reuniones interministeriales. Tras reconocer que el Ministerio de Seguridad Social ha de tomar la iniciativa, la ministra Díaz ha defendido que los trabajadores autónomos puedan beneficiarse del subsidio que reciben los desempleados de larga duración de más de 52 años, que hasta ahora quedaban fuera, porque hay que acreditar seis años de cotización como trabajadores asalariados.

En 2018 se ordenó la regulación como asalariados de casi 19.000 trabajadores, obligados a trabajar como autónomos

Reivindicaciones de los trabajadores autónomos

Reunidos con la responsable del ministerio de Trabajo, los representantes de los autónomos han planteado a Yolanda Díaz la necesidad de abordar medidas que frenen la siniestralidad laboral en el colectivo y mejorar la formación, un concepto por el que cotizan los autónomos desde hace un año.

Las tres asociaciones (ATA, UPTA y UATAE) han exigido un cambio en la regulación de la prestación por cese de actividad (el equivalente a la prestación contributiva de desempleo de los asalariados). En opinión de la ministra, «tramitar con éxito esa prestación es toda una odisea».

Otra reivindicación marcada por las patronales fue la creación de un subsidio asistencial que se parezca al de mayores de 52 años de los asalariados, pero para los trabajadores por cuenta propia que se ven obligados a cerrar sus negocios en los últimos años de su vida laboral. Para poder optar a estas ayudas, los asalariados deben haber cotizado, como mínimo, seis años por desempleo en el Régimen General, por lo que las asociaciones reclaman esta ayuda también para quienes hayan cotizado en el Régimen de Autónomos.

Sin embargo, la cotización por cese de actividad (el equivalente a la del paro en los asalariados) no lleva seis años siendo obligatoria para poder cubrir esta contingencia. Pese a ello (y a que Trabajo no tiene competencias en la materia), Yolanda Díaz se mostró favorable a que se otorgue este subsidio «porque todos los seres humanos deben tener idénticos derechos».

Sobre la posible subida de la base mínima para los autónomos, de forma transitoria, hasta que se reforme el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) para que sus afiliados dejen de elegir su base de cotización y coticen a la Seguridad Social en función de sus ingresos reales, varias fuentes apuntan a que esta subida podría estar en el entorno del 1% para 2020.